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La tercera persona de la Trinidad
by Thamar Cintron - Wednesday, 21 October 2015, 12:35 PM
 

Es interesante el mencionar que cuando hablamos del Espiritu Santo, este no es un mero poder ni una expression figurada de la energía divina, como muchos piensan. El Espiritu piensa, conoce el lenguaje, tiene volujntad (Ro. 8:27; 1Co. 2:10-13; 12:11). Se le puede tartar como una persona porque es una persona. Por lo tanto además el Espiritu enseña, testifica, concenve, conduce, entiende, habla, anuncia (Jn.14:26; 15:26; 16:8,13). Lo que significa que cuando el Espiritu Santo está presente este es el que lleva consigo al entrenador y al aprendiz de la mano para crearlos Fuertes.  El Espiritu Santo, no tan solo te enseña, te conduce, te guia, sino que también te Consuela.  Es interesante que William Barclay dice que " la function del Espíritu Santo es la de llenar a una personal con aquel Espíritu de poder y de coraje que le darán la capacidad para afrontar triunfantemente la vida".  Por ende el Espíritu Santo está y estará a estar al lado para hacer cumplir su function tanto en el entrenador como en el aprendiz.

 
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Re: La tercera persona de la Trinidad
by Demetrio Rodriguez - Monday, 9 November 2015, 2:15 PM
 

Una de las funciones principales, sino es la principal, cuando entrenamos cómo compartir el Evangelio, tiene que ver con "convencer de pecado" a quien le anunciamos el Evangelio de la gracia. Ciertamente que el Espíritu Santo está tanto con el aprendiz como con el entrenador PERO no es menos cierto que también es el que convence de pecado, lo cual es algo que ni el discípulo ni el entrenador pueden hacer. Nuestra parte es tener al Espíritu obrando en nosotros; es obedecer al Señor Jesús, los resultados de lo que hacemos es la obra exclusiva del Espíritu Santo. Debemos estar bien preparados pero eso no garantiza el resultado. Tu cita de Juan 16:8. Esta función del Espíritu Santo debe ser aclarada a todos los que entrenamos. Esa función del ES evita que pensemos que los resultados dependen de nosotros o nuestra preparación. Sin negar que tenemos que prepararnos.